Arroyo Las Picadas

Álamos en el arroyo

Nuestros cauces de agua naturales se han ido perdiendo poco a poco, por que ha llegado el agricultor o el dueño de la finca colindante con el arroyo y ha puesto un cercado diciendo que eso es de su propiedad y claro, eso no es así ni mucho menos, por que todos los ríos y las zonas de servidumbre del río son de dominio público.

Aquí, en nuestra localidad, se están recuperando varios de estos arroyos, uno de los que mejor ha evolucionado es el de Las Picadas, un sitio, que en realidad tiene poco espacio para desarrollarse como a los naturalistas nos gustase, porque apenas hay 2 km de río, pero al menos nos conformaremos con eso, ya que hace 5 años no había nada más que monocultivos de vid y por lo menos esto es un gran paso hacia adelante y con vistas al futuro, sin duda es esperanzador.

La idea de recuperar estos cauces surge de Luis Ramírez, biólogo y profesor de la universidad Santana de Almendralejo, que empezó a llevarse a sus alumnos a plantar arboles y arbustos, y no solo eso,

Alzacola, especie que está en Las Picadas

también había que convencer a los agricultores de que poner árboles en las orillas del arroyo no era malo, sino más bien todo lo contrario, que las riadas estarían controladas y la tierra fértil no se iba a ir corriente abajo, que lugares en los que año tras año era imposible plantar vides (por que las tormentas se las llevaban) ahora al estar el suelo más estable y el arroyo ya no se desborda, se pueden plantar.


Han pasado los años y esos agricultores que se quejaban de esos árboles que les quitaban nutrientes a sus viñas, ahora están encantados, precisamente por que se han dado cuenta

Cernícalo vulgar

de que les hacen más beneficio que estropicio. Y hemos pasado de criticar la actuación de Luis y sus alumnos y voluntarios, a ser los primeros defensores de ese bosquecito de galería, entre otras cosas por que les da una buena sombra también a la hora del almuerzo, por que corre un aire refrescante a pesar de las calores en los campos colindantes, por que aumentan la variedad de tonos verdes y es mucho más agradable el trabajo así.

Y la naturaleza es generosa ya que han empezado a llegar las aves (tarabillas, jilgueros, pardillos, verdecillos, verderones, gorriones, golondrinas...) que ayudan al agricultor limpiando de forma económica de plagas a sus viñas, y el trinar de las aves hace que el sonido de la autovía sea más digerible, ya que también los árboles minimizan el sonido continuo de los vehículos. 


Y como no, otro de nuestro sentidos, el olfativo empieza a notar olores olvidados, como el de la menta, la hierbabuena, el poleo y

Poleo silvestre

decenas de plantas que le dan más variedad a este espacio verde; los álamos son los árboles que mas han crecido, ya que fueron los primeros en plantarse y así poder ofrecerle una buena sombra  a los fresnos, olmos, sauces, majuelos, tamujos, alisos, loros, quejigos, alcornoques, pinos y otras especies de árboles que poco a poco van aumentando su porte. Haciendo que esa cobertura vegetal le dé refugio a algunos mamíferos, como el conejo, la liebre, el ratón de campo, la rata de agua, la comadreja y el zorro. También se empiezan a ver ofidios como la culebra bastarda.

Este arroyo conserva la humedad gracias a la depuradora de agua, que al limpiar los filtros una vez a la semana, se convierte en un pequeño corredor verde, es agua limpia, y que en la época del largo  estío veraniego ese agua es como maná para las plantas y los animales, como un pequeño oasis donde descansar y refrescarse. 

Pero no solo naturaleza, también hay historia en ese arroyo, ya que se tiene constancia de que existía una alberca bastante grande, pero que por desgracia ahora mismo está enterrada, ya que durante más de un siglo se han ido echando escombros hasta taparlas. Esa alberca frenaba las aguas torrenciales del otoño y evitaba que llegasen a la población, hoy ya no existe ese control, pero la idea es recuperarla en unos años. A ver si en poco tiempo sigo escribiendo entradas como estas, de nuestro pueblo y alrededores en el que podamos disfrutar un poco de la naturaleza.