He estado mirando los últimos campeonatos del mundo, y si las estadísticas no mienten, o yo no me equivoco con la calculadora, el porcentaje de victorias en cada match oscila aproximadamente entre el 30 y el 60 por ciento. Es decir, en el peor de los casos para un match de doce partidas corresponderían entre tres y cuatro victorias (el año pasado hubo cinco). Teniendo en cuenta que ya hemos consumido la mitad de este sin que hayamos disfrutado de ninguna, difícilmente llegaremos a cubrir nuestra cuota de victorias, pero en fin, si alguna ha de llegar será ahora o no será.
Entramos en la recta final del torneo, y a cada nueva tabla el margen de rectificación en caso de producirse una victoria será cada vez más estrecho. Lo cual podría suponer un mayor estímulo para arriesgar, el de la certeza casi absoluta de que el título aguarda al primero que consiga romper la igualdad, aunque mucho me temo que el efecto será el contrario. Porque si no han querido arriesgar hasta aquí ¿por qué habrían de hacerlo cuando todo se les puede ir al garete a la vuelta de una mala jugada, de un paso en falso? Crucemos los dedos de los pies para que esté equivocado y veamos a partir de hoy una recta final de campeonato acorde al nivel que se les supones a estos jugadores.
Un dato para la esperanza: por ejemplo en el Match PCA de 1995 disputado entre Anand y Kasparov, tras las ocho tablas iniciales en las siguientes seis partidas se sucedieron hasta cinco victorias por apenas unas tablas solitarias...
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¡¡¡Por fin!!!
ResponderEliminarHala, Anand, a seguir especulando con el desempate...
Ahora el match comienza a tener emoción, ahora Anand va a tener que transpirar la camiseta si quiere retener el titulo. Y el tema de las tablas viene comentándose desde la época de Capablanca (Quien invento un nuevo ajedrez para que dejen de producirse). Y no hay que condenar ni al 2012, ni a las super computadoras, es parte de la naturaleza del juego y tambien de la de los jugadores.Recorda el libro que te mostre titulado "Tablas".
ResponderEliminarNicolás.
Como testimonio podes ver el primer match entre Kasparov y Karpov en plena época en la que las maquinas eran todavía inferiores a practicamente cualquier jugador de ajedrez. Match que se suspendio por la cantidad de tablas que se producian y que no cesaban (Porque no contaban en el marcador y era el primero en llegar a 6 victorias quien ganaba el titulo).
ResponderEliminarNicolás.
Sí, no cabe duda que las tablas no las han inventado estos dos, y que quienes deciden no arriesgar son los jugadores y no los programas informáticos. Pero ya no es tanto por el número de tablas, es la forma en la que se producen. A mí me da la impresión, y tal vez no sea más que una idea subjetiva sin ningún fundamento, que los programas informáticos crean la ilusión de que se puede jugar desde la apertura hasta el final casi sin salir de la teoría, vamos, que se puede jugar al ajedrez sin tener que pensar. No creo que sea verdad, pero parece que cada vez falta menos para que lleguemos a eso. Y mientra más pequeño sea el margen de incertidumbre que le quede al ajedrez, menos dispuestos parecen los jugadores a aceptarlo.
ResponderEliminarInsisto, es sólo una impresión personal si más valor que ese.