Qué grande fue este genio del cine mudo, del cine cómico y del cine sin más, y qué pena que en su tiempo se viera siempre relegado a la sombra de ese otro genio y amigo que fue Chaplin. En fin, aprovecho para homenajearlo y ya de paso para avanzar en la serie. Incluso nos puede servir la entrada para retomar aquel viejo debate de si hay o no música en las películas mudas:
Me sé de alguien a quien Pumares le colgó el teléfono por hacer esa misma afirmación. O algo así cuenta la leyenda.
ResponderEliminarMuy muy grande Buster.
En el cine mudo lo que hay es buen cine. Y váyanse con la música a otra parte.
ResponderEliminarYo siempre que he visto cine mudo en TV o DVD había música de acompañamiento...
ResponderEliminarEn el cine sólo he visto TIEMPOS MODERNOS, AMANECER, LA QUIMERA DEL ORO, Y EL MUNDO MARCHA, EL MAQUINISTA DE LA GENERAL, EL DOCTOR MABUSE... y todas tenían musiquita.
Hasta que hace poco vi EL GOLEM en un cine y fue 100% muda.
Se oía hasta el vibrar de los móviles, y a la media hora un anciano sentado a mi lado comenzó a roncar, riéndose toda la sala :)
Pues entonces el Golem tampoco era mudo. Creo que en esto todos estamos más o menos de acuerdo: no eran las pelis la mudas, sino Pumares el sordo.
ResponderEliminarUn saludo.
Maravillosas estas cintas de Keaton, que con Chaplin me llenaron muchas horas de risas francas e inocentes...
ResponderEliminarAhora que hablamos de Keaton me tienta decir que era insuperable, que nadie le podía hacer ni sombra. Pero no, en esto te voy a dar toda la razón, no hay por qué elegir entre ambos. Keaton y Chaplin, maravillosos los dos.
ResponderEliminarYo sólo digo que la Paulette Goddard de Tiempos modernos debe ser, siendo extremadamente conservador, una de las tres mujeres más hermosas que he visto en mi vida. Y punto.
ResponderEliminarLo de Pumares y Adolfo NO es una leyenda. Soy testigo y hay (o había) grabaciones que lo demuestran.
ResponderEliminarPues estaría bien recuperarlas si las siguiera habiendo, porque el intefecto guadar silencio. Vamos, ni que le hubieramos preguntado por la naturaleza de los entes matemáticos...
ResponderEliminarNunca olvides que, antes que filósofo, estudió Ciencias Físicas.
ResponderEliminarHabía una grabación, hecha por él, de la conversación.
Después de preparar una batería de preguntas, con todo el interés y cariño del mundo, va el tío (el Pumares) y, cabreado, le cuelga el teléfono.
Al día siguiente, me comenta con pena: -¿Por qué no llamas tú y se las haces?
Jajaja, jo que penita. Deberías haber llamado, aunque sólo fuera por dejar en evidencia a Pumares.
ResponderEliminarLo sé, Krugius, lo de las ciencias, aunque lo de los entes matemáticos va por otro asunto hilbertiano que el interfecto -por cierto, antes me comí una r: interrrrrrrrrfecto- conoce sobradamente.
Un saludo afectuoso.
Las erres están muy ricas, pero mejor un bocadillo de polvorones...
ResponderEliminarBueno, no hagáis leña del árbol caído, cabroncetes. El Pumares me colgó porque justo antes de darme paso a mí estuvo hablando con un tipo más pavo que los que se comen en Navidad (¿o es en Pascua?) Pero vamos, que pelín capullo sí que ha sido siempre, y aprovechó que en la siguiente llamada el tipo le entró con un "¿No es un delito de lesa majestad...?" para completar con un "decir que las películas mudas tienen sonido. ¡Hay que ser muy bruto, muy bestia, para decir que las películas mudas tienen sonido!" De lo demás, José Luis fue testigo. Por cierto, José Luis, dame un toque en uno de estos días y nos tomamos un café.
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