Nos desplazamos bien cerquita en este caso, en los salones del Hotel Vetonia de Almendralejo, que nos cedió gentilmente un lugar para celebrar estos dos sábados las rondas de las 3 divisiones del ajedrez por equipos extremeño. Eso, implica el colocar las mesas, tableros, muchísimas piezas, coordinar los equipos de Almendralejo, con sus niños que no terminan de saber donde se colocan, vamos, un poco de estrés...
Y uno, encima, jugándose media competición contra el Cibeles de Mérida. No es que de haber ganado nos habríamos evitado el hacer cábalas por el descenso, pero sí que la tensión iba más para otros equipos, total, que todas esas cosas cuentan y ahora, voy a narrar un poco como quedó la cosa en esta 7ª ronda en Almendralejo.
Benjamín García vs Imme Van den Berg; todo parecía discurrir por una defensa eslava, hasta que Imme decidió homenajear a su País nativo y jugar la defensa holandesa, variante del muro de piedra. Un par de cosillas excéntricas por parte de Imme, un Ce4 prematuro, sin haber terminado el desarrollo del flanco de rey, y casi que lo peor, ese Dh4, que me dolía la vista... Detalles que su rival fue aprovechando poco a poco, fue pasando piezas al campo de Imme, después cambió las piezas necesarias y finalmente ganó un peón, que le daba una ventaja enorme para obtener el punto. 1-0
Paco Macías vs Antonio Vélez; no me esperaba una defensa Caro-Kann por parte de Antonio, no va con su forma de jugar al ajedrez (o la que yo conozco, esa de gambitos letones, sicilianas, ataques cruentos..., ¡se nos ha moderado el chaval!), pero yo tenía ganas de marcha, así que no hay mejor variante que el Ataque Panov para estos casos. Lo que pasa, es que no recordaba bien las sutilezas de la variante e hice un Ae3, que no pegaba con el espíritu de la variante. Así que Antonio jugó un fianchetto por el ala de rey y enrocó. Así que empezó a derivar la partida por cauces posicionales, mi Tb1, llevaba la idea de aprovechar la ventaja en el flanco de dama. Pero veo las intenciones de crujirme con e5 por Antonio. Invierto media hora de tiempo, y me meto en un lío táctico considerable, todo era qué pasaba si comía con Axc3! y en las variantes que analicé, me parecía que no quedaba mal, el programa le da una ligera ventaja al negro, así que no estaba mal analizado por mi parte. Pero Antonio, escoge la variante mas tranquila, pero mucho peor para él, ya que mis peones se vuelven móviles y llegan muy lejos, tanto me emocioné, que no calculé bien cual era la variante que me dejaba con más ventaja. Después de ganar una calidad, por dos peones, Antonio me ofreció el empate, pero como al equipo no le valía de nada las rechacé y así forcé, hasta meterme en una posición perdida... 0-1