La caída del consumo y del gasto público frenan la economía española
La recaída del consumo de los hogares, que ha registrado un retroceso
interanual del 1,1%, y la mayor contracción del gasto público (3,6%) y
de la inversión empresarial (6,2%), han provocado la desaceleración de
la economía española en el último trimestre de 2011. Y el futuro no es
halagüeño porque se producirá un "empeoramiento" de la situación, tal y como ha advertido el ministro de Economía, Luis de Guindos.
El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha publicado este jueves
la contabilidad nacional de 2011, después de que el pasado 30 de enero adelantara
que la economía española se acercaba a la recesión en el cuarto
trimestre tras caer un 0,3% respecto al anterior. Si bien, en el
conjunto del año, el PIB avanzó un 0,7%.
El empleo ha acelerado su caída y ha retrocedido el 3,3%, lo que supone la reducción neta de casi 570.000 puestos de trabajo a tiempo completo
en un año. Y ha caído en todas las ramas de actividad, aunque en la
única que se ha desacelerado la destrucción de puestos de trabajo ha
sido en la agricultura y ganadería.
La demanda exterior ha aumentado su contribución
positiva al PIB del último trimestre de 2011, pasado de 2,2 a 3,2
puntos, como consecuencia fundamentalmente del notable descenso experimentado por las importaciones (5,9%), dado que el ritmo de crecimiento interanual de las exportaciones se ha ralentizado (5,2%).
Frente a la fortaleza del sector exterior, la demanda nacional ha
agudizado su caída y ha tenido una aportación negativa al PIB de 2,9
puntos.
La recaída interanual del consumo privado se explica porque el principal recurso de los hogares, la remuneración de los asalariados, ha decrecido el 2,1%, aunque el INE dice que el comportamiento contractivo de las familias es también consecuencia de la caída de la confianza.
Respecto al ajuste en las administraciones públicas, la reducción del
gasto es mayor en la compra de bienes y servicios que en la
remuneración de los asalariados.
La formación bruta de capital fijo (inversión) ha acentuado su decrecimiento, sobre todo por un peor comportamiento de la inversión en construcción, que cayó el 8,2%, mientras que la demanda de bienes de equipo se contrajo el 2,7%.
Del lado de la oferta, la actividad en la industria ha recaído (0,4%)
después de seis trimestres consecutivos de crecimiento, en tanto que la
construcción ha registrado una caída aún mayor que en el trimestre
precedente (3,7%).
En el sector servicios y la agricultura la actividad ha seguido
creciendo, aunque a menor ritmo: el 0,9% y el 0,3%, respectivamente.
En el caso de los servicios el menor ritmo de avance es para las
actividades relacionadas con el turismo, mientras que las actividades
profesionales y las ligadas a la información y las comunicaciones han
mostrado un mayor dinamismo.
Habrá un 'empeoramiento'
El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, ha
advertido que todas las previsiones de los organismos internacionales
vaticinan que se producirá un "empeoramiento" de la economía española
durante este ejercicio.
De Guindos ha valorado así, durante su intervención en el pleno del
Congreso de los Diputados, el dato definitivo de PIB de 2011 conocido
este jueves. "Este descenso pone de manifiesto que no ha habido recuperación de la economía en ningún momento desde el inicio de la crisis", ha aseverado.
El ministro ha recordado que las principales instituciones apuntan
que el PIB español se contraerá este año un 1,5% y esta situación, "sin
duda, también se verá reflejada en los indicadores del mercado laboral
español".
De Guindos ha dicho además que estas previsiones contrastan
"sensiblemente" con las del anterior Gobierno, que establecía
crecimiento del PIB y creación de empleo.
Ahí estamos, bien encauzaditos, listos para recibir al futuro. Por supuesto no con los brazos abiertos, que cuando se tiene una mano delante y otra detrás, tapando las vergüenzas que a otros no parecen ruborizar es imposible siquiera intentarlo. Como tampoco debería ser posible pretender apretarse el cinturón y bajarse los pantalones al mismo tiempo, aunque camino vamos de conseguirlo.
Para gran sorpresa de todos en el último trimestre el consumo interno ha decaído; el gasto público ha decrecido; la inversión ha menguado; los salarios se han encogido; el empleo, que ni está ni se le espera, ha retrocedido; la economía se ha contraído y nosotros... en fin, nosotros nos seguimos haciendo cada día más pequeños. Y dice el ministro del ramo lo que antes del 20 de noviembre nunca se les oyó decir: que la cosa será larga. Y por una vez les creo: muy larga... y muy dura. Como en las películas X. Y ahora ponte a despejar la incógnita.